Así es. Según un estudio recientemente publicado por el periódico estadounidense digital BMJ Open, los peatones que se desplazan en sillas de ruedas sufren, en comparación con el resto de la población, tres veces más accidentes mortales durante su uso de la vía pública. Otro dato a tener en cuenta es que, en su gran mayoría, muchos de estos accidentes mortales se producen en intersecciones de calles. Según la información recogida por BMJ Open, entre los años 2016 y 2012, 528 usuarios de sillas de rueda murieron en accidente de tráfico en los EE UU. El estudio se refiere a colisiones entre una silla de ruedas y un vehículo a motor. Esto supone un riesgo superior al 36% de perecer en comparación con el resto de la población.
“Comprender y describir los riesgos, es el primer paso para evitarlos”. Estas son palabras del doctor John Kraemer, autor del estudio. Profesor de la Universidad de Georgetown especializado en sistemas públicos de salud. Para realizar el estudio, John Kraemer se han apoyado en informes policiales. Con respecto a los datos recogidos por el estudio, los investigadores han llegado a la conclusión de que el riesgo mayor, en el caso de peatones que se desplazan en silla de ruedas, se da en edades entre 50 y 64 años de edad.
Siguiendo con el análisis de los datos del estudio, se ha comprobado que un alto porcentaje de los accidentes se dan en poblaciones que no tienen ni semáforos ni pasos de cebra
. Además, en un 75% de los siniestros no hay pruebas de que el conductor implicado tratase de evitar el accidente. Un 15% de estos dijeron que ni siquiera vieron a la persona en silla de ruedas… hasta que ya era demasiado tarde. El estudio concluye que sería especialmente importante que las comunidades se preocuparan, a la hora de diseñar los espacios públicos, de incluir infraestructuras (rampas, aceras más anchas, carriles reservados…) que permitieran el desplazamiento de usuarios den silla de ruedas.