Cuando uno presenta su candidatura para un trabajo puede verse ante dos posibilidades: tener que completar una solicitud o tener que escribir un currículum. En cualquier caso, el objetivo siempre será, evidentemente, el de diferenciarse del resto de los candidatos. ¿Cómo conseguirlo cuando se es una persona discapacitada? ¿Cómo conseguir llamar la atención de un reclutador, remarcando que la discapacidad no es incapacitante? ¿Cómo hacer ver, a la persona que va a hacer la selección, que discapacidad no significa falta de fortalezas y habilidades? Aquí van algunos consejos para conseguirlo y que deberíamos de destacar para diferenciarnos de los demás candidatos.
- Determinación:
He demostrado, muchas veces, que soy capaz de hacer muchas cosas… pese a que los demás, en ocasiones, quieran detenerme
- Resolución de problemas
Estoy acostumbrado a conseguir mis retos diarios, incluso rodeado de obstáculos tales como incontables barreras arquitectónicas.
- Habilidades de comunicación
Estoy acostumbrado a relacionarme con los demás, por ejemplo, cuando necesito hacer algo que yo no puedo hacer por mi mismo. Por esta misma razón, he desarrollado el hábito de desarrollar habilidades personales
Lo ideal, en todos estos casos, es identificar nuestras habilidades claves y proporcionar, al entrevistador, un par de ejemplos que demuestren por qué estas habilidades son nuestras fortalezas. Sería importante que la mayor parte de estas habilidades no estén relacionadas, en la medida de lo posible, con la discapacidad. También tener cuidado para que los puntos que se destaquen estén relacionados, lo más posible, con el puesto de trabajo para el que se presenta la candidatura.
También puede interesarte
-Menos absentismo laboral entre los discapacitados
-El primer supermercado de España gestionado por discapacitados