Muchos expertos en rehabilitación de personas discapacitadas están de acuerdo: la realización de las distintas técnicas de respiración, pranayamas y meditación que se ejercitan con el yoga aportan beneficios físicos y psicológicos a las personas con movilidad reducida. Y es que, para personas con algún tipo de discapacidad motora, la práctica de diferentes técnicas de respiración (principalmente, diafragmática, intercostal, clavicular, circular, completa, cuadrada y yóguica) permiten mejoras, sustanciales, en la respiración de la persona.
Mejorar la respiración
En el caso particular de las personas tetrapléjicas, los movimientos deben ser asistidos. Según la profesora de yoga, Viviana Daya Devi Cortés, “dada la afectación al diafragma, que normalmente asociado a este tipo de lesiones, las variadas técnicas de respiración y de pranayamas que se ejercitan con el yoga son los primeros pasos para lograr mejorar la función respiratoria. Esto sin contar con la mejora psicológica que la práctica de todos estos ejercicios produce»
El Yoga Nigra
Esta modalidad de yoga es una técnica especialmente indicada para las personas con discapacidad motora, puesto que permite llegar a un estado de relajación tanto físico como emocional y mental. Esto se debe a que, al relajar la mente, es posible alcanzar estados de conciencia mayores que favorecen el tener una mayor seguridad interna para lograr una mejora tanto a nivel emocional como físico.
El Hatha Yoga y sus asanas
También muy recomendada la práctica de esta modalidad de yoga en el caso de personas con discapacidad motora. Esto es debido a que aporta firmeza y elasticidad. Y eso pese a que, en personas con movilidad reducida, el Hatha Yoga se hace de manera impulsada y pasiva.